El secretario general de la ONU, António Guterres, ha contestado con una “calurosa bienvenida” el anuncio de la orden ejecutiva que acaba de firmar, en lo que es uno de sus primeros actos oficiales, el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden. La orden impulsa la reincorporación del país al Acuerdo de París y su adhesión a la coalición creciente de Gobiernos, ciudades, Estados, empresas y personas que están tomando acciones ambiciosas para enfrentarse a la crisis climática. Como respuesta, Guterres ha difundido un comunicado en el que ha contextualizado la decisión de Biden: “tras la Cumbre de Ambición Climática del año pasado -ha señalado el secretario general de Naciones Unidas-, los países responsables de producir la mitad del carbono mundial se comprometieron a lograr la neutralidad de sus emisiones en las próximas décadas. Ahora, con la intención expresada del presidente Biden se cubrirían dos tercios de las emisiones de carbono”.
El camino es largo
La noticia es pues sumamente positiva, pero, según Guterres, “aún queda un largo camino por recorrer debido a que la crisis climática continúa empeorando y se acaba el tiempo para limitar el aumento de temperatura a +1,5 grados centígrados y construir más sociedades resilientes al clima que ayuden a proteger a los más vulnerables”. El máximo mandatario de la ONU se ha mostrado en todo caso esperanzado en que Estados Unidos lidere “la aceleración de los esfuerzos globales hacia las cero emisiones netas, incluyendo la presentación de una nueva Contribución Determinada a Nivel Nacional* con objetivos ambiciosos para 2030 y dotados de la financiación necesaria antes de la COP26 en Glasgow a finales de este año”. Guterres se ha comprometido en ese sentido a trabajar “en estrecha colaboración” con el presidente Biden y otros líderes “para superar la emergencia climática y que el mundo se recupere de la crisis del Covid19 de una forma más sostenible”.
Tras la firma de la orden ejecutiva, Biden enviará una carta a las Naciones Unidas expresando la intención de unirse nuevamente al Acuerdo de París, el primer paso del protocolo para retomar la membresía, lo que tomará 30 días para que se formalice.
En 2017, la Administración Trump pidió que el país fuera removido del Acuerdo (que había sido firmado por 194 naciones en 2015, durante la presidencia de Obama). El objetivo del Acuerdo de París es mantener el aumento de la temperatura global de este siglo muy por debajo de los +2°C por encima de los niveles preindustriales, y realizar esfuerzos para limitar el aumento de temperatura a +1,5°C. La decisión del Gobierno del país norteamericano de retirarse, debido a las regulaciones establecidas, se materializó formalmente en noviembre de 2020.
*Los objetivos que cada país se propone alcanzar para cumplir con el Acuerdo de París.
