La Asociación de Empresas de Energía Eléctrica (aelēc), de la que forman parte como socios Iberdrola, Endesa y EDP España, ha lamentado que el Gobierno haya decidido mantener el impuesto extraordinario al sector energético y su intención de hacerlo permanente. En un comunicado, la presidenta de la patronal eléctrica, Marina Serrano, considera que se trata de un impuesto que se justificó por su carácter temporal "derivado de una coyuntura excepcional". Por ello, considera que el hecho de que ahora se establezca el mantenimiento de este impuesto, "es convertirlo en permanente, cuando han desaparecido las circunstancias que dieron pie a su implantación", según informa Europa Press. Serrano subraya que el gravamen temporal sobre los ingresos de las energéticas en vigor este año y en 2024 no estaba en línea con lo establecido en la Unión Europea, ya que el impuesto europeo se destinaba a gravar los beneficios y no los ingresos, y establecía "un impuesto únicamente a las empresas de petróleo, carbón y gas".
En una entrevista en exclusiva de Energías Renovables a Marina Serrano le preguntamos sobre el particular: "aelēc ha recurrido ante la Justicia el “gravamen temporal energético” [un impuesto del 1,2% sobre el importe neto de la cifra de negocios en caso de que este sea mayor de 1.000 millones de euros]. ¿Por qué?" Aquí parte de su respuesta: "Porque consideramos que el gravamen es discriminatorio e injustificado". Las grandes compañías energéticas cada año crecen en beneficios. Este 2023, por ejemplo, y antes de que lleguen las cifras finales que engloban todo el año, Iberdrola -en los nueve primeros meses del año- ha registrado un incremento del 17,2% y 3.637 millones en su beneficio neto con respecto al mismo periodo del ejercicio pasado; Naturgy ha declarado en este primer semestre del año ingresos brutos por valor de 2.849 millones de euros (ebitda) y un beneficio neto de 1.045 millones de euros (+87,6%); y Endesa con un beneficio ordinario neto de 1.059 millones de euros en los nueve primeros meses del año. En conjunto, Iberdrola, Naturgy y Endesa tendrán que abonar este año 2023 cerca de 1.483 millones de euros por este tributo.
Valoraciones de otras prórrogas
En lo que respecta a las medidas fiscales, Serrano advierte de que en el caso del aumento del IVA del suministro eléctrico del 5% al 10% durante todo el 2024 debería valorarse el mantenimiento de un IVA reducido a más largo plazo "por sus efectos antiinflacionistas y para evitar gravar los consumos eléctricos finales que contribuyen a la descarbonización". En lo que se refiere a la retirada gradual de la bajada del Impuesto Especial de la Electricidad (IEE) señala que gravar consumos eléctricos finales mientras se subvenciona la tarifa regulada de gas "no es consistente con los objetivos de descarbonización". Igualmente, asegura que la reimplantación gradual del Impuesto sobre el Valor de la Producción de Energía Eléctrica (Ivpee) "supondrá una penalización para la electricidad, dificultando la inversión en nueva producción renovable, en un momento en que las señales deberían ir precisamente en sentido contrario".
Por otra parte, Serrano aplaude la prórroga de los plazos establecidos para la conexión a red de los proyectos de energías renovables hasta los ocho años, ya que "busca evitar tensiones en la cadena de valor que podrían encarecer los proyectos y aumentar las importaciones de bienes de equipo". Finalmente, sobre el mantenimiento de los descuentos del bono social y de la prohibición de la interrupción del suministro como protección a los consumidores vulnerable, considera que se debe "avanzar en la definición de criterios objetivos para la determinación de la situación de vulnerabilidad, sobre la base de la renta efectiva disponible y de la relación del coste de la factura energética sobre los ingresos efectivos, de manera que se garantice que la ayuda llega a los colectivos que la necesitan".
Entrevista a Marina Serrano, presidenta de la Asociación de Empresas de Energía Eléctrica, aelēc